El evento se inauguró en el Teatro Compensar, donde la oboísta Luisa Acero realizó un concierto, marcando el comienzo de un festival que sin duda conquistará a los seguidores de la música clásica.
Imagen del concierto de inauguración en el Teatro de Compensar. (Foto Estudiantes Javeriana)
El 22 de febrero, comenzó la segunda edición del Circuito Clásico 2025 con un concierto protagonizado por Luisa Acero, una joven muy talentosa en el oboe. A sus 21 años, Luisa deslumbró con una gran variedad de piezas que incluía desde el barroco hasta la música contemporánea, acompañada por el Trío de Cuerdas de la Orquesta Sinfónica de Bogotá. Este evento no solo fue un homenaje a la música clásica, sino que también tuvo el objetivo de atraer a nuevas audiencias al universo de la música sinfónica.
El teatro Compensar fue testigo de una noche única el pasado 22 de febrero, cuando el Circuito Clásico empezó con un concierto de oboe de alto nivel. Este evento dio inicio a la segunda edición del festival, que promete seguir sorprendiendo al público con propuestas cada vez más interesantes y variadas.
Este año, el Circuito Clásico vuelve con una propuesta aún más prometedora, con la participación de músicos internacionales de países como Japón, Uruguay, España y Ecuador, además, por supuesto, músicos colombianos.
En una entrevista realizada, Adam Zajac, director general de la Orquesta Sinfónica de Bogotá, habló de su emoción por lo que promete esta nueva edición, señalando que, además de los artistas elegidos, esperan seguir sorprendiendo al público con propuestas que mantengan el interés y la expectativa.
El programa de la noche permitió a los espectadores realizar un viaje entre épocas y estilos, con obras de compositores como Bach, Britten, Mozart y Piazzolla. Cada pieza fue una representación del camino que ha recorrido el oboe a lo largo de los siglos, Luisa Acero hizo que ese viaje se sintiera como un cuento encantado en el que cada melodía hablaba por sí sola.
El concierto también tuvo la presencia del Trío de Cuerdas de la Orquesta Sinfónica de Bogotá, que está conformado por Anyango Yarbo-Davenport en el violín, Andrés Cuervo en la viola y Raphael Ocampo en el violoncello. Su interpretación, en conjunto con el oboe, dio vida a un mundo musical. La combinación de las cuerdas con el sonido de este instrumento creo algo mágico, transportando al público a otra época y construyendo un universo de emociones que se sentían en cada nota. Solo quien lo vivió sabe realmente cómo fue la magia de este show.
El Circuito Clásico 2025 busca romper la idea de que la música clásica es solo para adultos. Como lo mencionó Camilo Cáceres, gestor cultural de Compensar, el festival acerca la música sinfónica y académica a más personas con un enfoque pedagógico: "Tal vez podemos ver esa música como distante o difícil, pero la idea es acercarnos a ella de otras maneras”.
La participación de jóvenes talentos como Luisa demuestra que la música clásica sigue viva y en constante evolución. Intérpretes de 15, 20 o 22 años están redefiniendo el género y mostrando que no es exclusivo de generaciones adultas como pensamos.
Impulsado por Cultura Compensar y la Sinfónica de Bogotá, el Circuito Clásico es un espacio donde la tradición y la innovación se encuentran. Su segunda edición promete ser una experiencia inolvidable, reafirmando que la música es un lenguaje universal que conecta a todas las edades.
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